20 de junio de 2025

Tensión en la Asociación Esquinense de Básquet: Nicolás Galarza explicó su rol como interventor deportivo

 

En diálogo con La Mañana de Noticias, Nicolás Galarza, actual interventor deportivo de la Asociación Esquinense de Básquet, dio su versión sobre la compleja situación institucional que atraviesa el básquet en la ciudad. La entrevista se desarrolló con la intención de “escuchar la otra campana”, ante la controversia generada en torno al funcionamiento y legitimidad de las autoridades actuales de la Asociación.

Galarza, en su rol de interventor designado por la Federación de Básquetbol de Corrientes, explicó que su función es netamente deportiva. “Estoy como interventor coorganizador deportivo. La Federación me envió la resolución y estoy agradecido por la responsabilidad. Creo que la estamos cumpliendo muy bien, con mucha gente colaborando”, sostuvo.

Durante su intervención, detalló acciones concretas que se realizaron en los últimos meses: “Hicimos dos campus, uno gratuito con la Selección Argentina, trajimos al entrenador de la Selección de Paraguay, y desarrollamos cursos de árbitros y mesa técnica en Esquina. Son cosas que en seis años la gestión anterior no hizo nunca.”

Una de las cuestiones centrales del conflicto es la falta de convocatoria a asamblea por parte de la dirigencia anterior. Según Galarza, “personería jurídica vino el fin de semana y los intimó a convocar a una asamblea en un plazo de 60 días. Es algo que los clubes de Esquina reclamaron varias veces y nunca obtuvieron respuesta”.

Frente a esto, señaló con énfasis: “Ahora resulta que los malos de la película somos los que estamos haciendo las cosas bien. La anterior gestión tuvo cuatro años para presentar balances y nunca lo hizo”.

Consultado sobre el estado legal de la Asociación, fue categórico: “La asociación nunca tuvo nada, ni siquiera un CUIT. Yo no puedo tener personería jurídica si nunca se gestionó. Mi tarea es exclusivamente deportiva. Los clubes manejan la caja, pagan árbitros y mesa técnica. El dinero queda para ellos y para lo que los chicos necesiten”.

Además, aclaró que el mandato de la dirigencia anterior venció en 2023, por lo que considera insólito que aún pretendan tener atribuciones.

En cuanto a los clubes habilitados para votar en la próxima asamblea, Galarza expresó su preocupación: “Uno de los clubes no tiene básquet hace más de 10 años. ¿Te parece lógico que pueda votar?”. Según indicó, solo tres clubes estarían en condiciones de participar en el proceso.

La situación del básquet esquinense continúa siendo tensa y con muchos interrogantes. Mientras tanto, los torneos y actividades deportivas se siguen desarrollando bajo la organización del interventor, con la expectativa puesta en que la asamblea definitiva pueda celebrarse dentro del plazo establecido y marque un nuevo rumbo institucional.