4 de mayo de 2013

Un perro llora desconsoladamente sobre la tumba de su dueña

Un perro de raza siberiano, parece llorar desconsoladamente sobre la tumba de la abuela de su dueña, que capturó el emocionante momento para compartirlo en la web.

En internet abundan las filmaciones de animales realizando actos dignos de admiración. Desde rescates hasta demostraciones de lealtad extremas, como ha quedado demostrado en más de una ocasión en funerales donde se podía apreciar a mascotas llorando a sus dueños. Algo similar publicaron hace algunos días en el portal de videos de Google.
El video posee más de 900.000 visitas (914.745 al cierre de esta nota) en YouTube y, pese a la intención de destacar la actitud del canino, desató la polémica por lo que realmente estaba manifestando el animal. Es que hay quienes aseguran que "Wiley", como se llama la mascota, no estaba llorando, sino que sufre de problemas respiratorios.
La dueña y autora del video salió al cruce de las acusaciones, afirmando que su perro no registra ningún problema de salud como el que se menciona en los comentarios. Explicó además que pertenece a una organización dedicada a acompañar y recuperar veteranos de guerra.
"No soy veterinaria, por lo que no puedo decir que su respiración se deba a problemas respiratorios. Sólo puedo decir que nunca había hecho algo parecido, ni volvió a hacerlo después", escribe Sarah Varley en su cuenta personal de YouTube.



Crean el primer robot submarino de Argentina‏

El ICTIOBOT, un eficaz buzo de la mano de la Inteligencia Artificial, puede sumergirse 50 metros en mar abierto y alcanzar velocidades de hasta 1,5 metros por segundo. El dispositivo puede cumplir varias tareas: mantenimiento de puertos, estudio de especies marinas o inspección de las instalaciones de las plataformas petroleras off shore.




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Por primera vez en la historia, dos Papas conviven en el Vaticano

Benedicto XVI llegó a lo que será su casa en la Santa Sede -por primera vez desde su renuncia el 28 de febrero- al inicio de una era sin precedentes para la Iglesia Católica en la que un ex pontífice vivirá al lado de otro que ejerce el cargo. Por primera vez en la historia dos papas conviven desde hoy en el Vaticano, tras el regreso, dos meses después de renunciar al pontificado, de Benedicto XVI, que residirá a escasos metros de Francisco, aunque "oculto para el mundo".

Joseph Ratzinger, de 86 años, quien desde su renuncia el 28 de febrero vivía en el palacio pontificio de Castel Gandolfo, a 30 kilómetros al sur de Roma, fue recibido por Francisco a las puertas del monasterio Mater Ecclesiae, en los jardines vaticanos, que será su residencia definitiva, reportó la agencia EFE.
"El papa Francisco le ha dado la bienvenida con gran y fraterna cordialidad. Después, juntos, se dirigieron a la capilla del monasterio para rezar", precisó el Vaticano en un comunicado.
Benedicto XVI "ahora está feliz por volver al Vaticano, donde pretende, como él mismo dijo el 11 de febrero -día en que anunció su renuncia- dedicarse al servicio de la Iglesia, sobre todo con la plegaria", precisó el portavoz, Federico Lombardi.
Ratzinger también prometió cuando se despidió de los cardenales "respeto incondicional y obediencia al nuevo papa", por lo que todos los observadores vaticanos, conociendo su personalidad y discreción, aseguran que no habrá "interferencias".
El papa Ratzinger se encuentra bien de salud, no tiene ningún problema específico, solo los achaques típicos de la edad, aseguró recientemente Lombardi.
Cuando recibió el 23 de marzo a Francisco en Castel Gandolfo se le vio moverse con cierta dificultad apoyándose en un bastón, con la voz más débil y más delgado que antes.
"El papa emérito es un anciano, debilitado por la edad, pero no tiene ninguna enfermedad", precisó Lombardi.
Benedicto XVI regresó al Vaticano en helicóptero, el mismo medio en el que había abandonado el 28 de febrero cuando puso fin a casi ocho años de pontificado.
En el helipuerto fue recibido por el decano del Colegio Cardenalicio, Angelo Sodano; el secretario de Estado, cardenal Tarcisio Bertone; y el presidente del Governatorato (gobernador de pequeño estado), el purpurado Giuseppe Bertello.
También le acogieron el sustituto de la Secretaría de Estado (número 3 del Vaticano), el arzobispo Angelo Becciu; el subsecretario de Asuntos Exteriores, el arzobispo Dominique Mamberti; y el secretario del Governatorato, el arzobispo Giuseppe Sciacca.
Desde el helipuerto se trasladó en coche hasta el cercano monasterio, donde lo esperaba Francisco. Fue la segunda vez que se vieron personalmente desde que el argentino Jorge Bergoglio fue elegido papa el 13 de marzo. Francisco había viajado el 23 de marzo a Castel Gandolfo para saludarlo y almorzar con él.
En estos dos meses de papado, Francisco y Benedicto XVI han hablado, no obstante, en numerosas ocasiones por teléfono.